Por extraño que parezca, puedes tener perros y gatos en la misma casa, pueden vivir en armonía, tranquilidad y respeto. Pero dependiendo de tu situación, lograr esta armonía puede ser un poco laborioso. Sin embargo, aquí te enseñaremos a tener perros y gatos en la misma casa.
Antes de introducirnos en la enseñanza educativa de nuestras mascotas, tenemos que entender que sus comportamientos suelen estar más influenciados y dictado por sus instintosy por sus antepasados durante el desarrollo y curso de sus vidas.
Es decir, si nuestro perro tiene antecedentes de agresividad e intolerancia incluso con otros perros, será muy difícil conseguir que conviva con nuestro gato. No es específicamente imposible, pero es más difícil lograr este tipo de convivencia.
En este tipo de casos, antes de intentar que nuestro perro conviva con el gato, tenemos que trabajar en el comportamiento de nuestro perro en general para paliar, controlar y erradicar aquellas emociones negativas.
Algo muy similar sucede con los gatos, aunque se adaptan más fácilmente a las nuevas mascotas, aunque sean de otras especies animales. Ahora que estos puntos han quedado claros, lo invito a leer las instrucciones a continuación.
¿Qué necesitas para tener perros y gatos en la misma casa?
Perro
Gato
Alimento
Agua
Juguetes
Toalla
Habitaciones
Instrucciones para tener perros y gatos en la misma casa
Comprender las diferencias de edad y lo que esto implica dentro de la convivencia animal. En el caso de los gatos y perros jóvenes, cuando la convivencia comienza desde la infancia, es mucho más fácil que se adapten entre sí sin problema y sin esforzarse por llevarse bien. Incluso es posible que dentro de su convivencia sean considerados como parte de la manada. Pero en el caso de animales adultos o cuando hay un diferencia de edad notable entre uno y otrola convivencia puede ser más difícil y tendremos que trabajar más para lograr la armonía entre ambos.
Es muy importante que la nueva mascota, ya sea un gato o un perro, tenga una espacio personal seguro donde nadie le haga daño, ni los perros, ni otros gatos, ni mucho menos los humanos, nadie. En este lugar deberás tener agua, comida y un lugar cómodo para dormir.
Unámoslos por el olfato. Antes de siquiera pensar en juntar a nuestras dos mascotas en la misma habitación, tenemos que hacer que se conozcan sutilmente. Para ello, utilizaremos el olfato como herramienta. Los animales relacionan el olor con diferentes tipos de estímulos. Los estímulos que queremos crear son estímulos positivos. Para conseguirlo, daremos de comer a nuestras mascotas, cada una por separado, en habitaciones juntas, preferentemente, comerán delante de las puertas.
Hacemos esto para que nuestras mascotas relacionen el olor del otro con algo positivo como la hora de comer. Haremos esto por unas semanas.. Si notas que tu perro está inquieto en estos momentos, trata de tranquilizarlo y premiarlo por su buen comportamiento. Así entenderá que el individuo al otro lado de la puerta no es una amenaza para él, y relacionará su olor con algo positivo.
Seguiremos utilizando el olfato como herramienta estratégica para acercar a nuestras mascotas y acostumbrarlas a su presencia. Acariciaremos a nuestras mascotas con una toalla limpia. Usaremos esta toalla para acariciar a ambos animales. De esta forma nuestras mascotas podrán olerse el uno al otro indirectamentey relacionará este aroma con algo positivo, que en este caso son las caricias.
Cuando haya pasado aproximadamente un mes desde la llegada de nuestra nueva mascota a la casa, llevaremos al individuo que ya vivía en la casa, a la habitación de nuestra nueva mascota. Pero haremos esto sin que nuestras mascotas las encuentren allí juntas para evitar que se sientan amenazados o haya tensión. En esta habitación donde solíamos tener nuestra nueva mascota, daremos de comer a nuestra otra mascota a la que intentaremos acostumbrar al nuevo miembro de la familia.
De esta manera tu relacionará ese lugar y esa presencia con algo positivo como hemos mencionado anteriormente. A partir de estos momentos intentaremos dar de comer a nuestra mascota en este lugar, pero siempre evitaremos la presencia de nuestra nueva mascota mientras come aquí nuestra antigua mascota. Una vez que termine de comer, podremos devolver a nuestra nueva mascota a su casa. Cuando nuestra otra mascota ya no esté, su olor permanecerá, haciendo que nuestra nueva mascota se acostumbre a la anterior. Es ideal para alimentar aquí a nuestra nueva mascota, una vez que la anterior ya no esté presente.
Podemos hacer esto durante un par de semanas. Si consideras que tus mascotas no están reaccionando negativamente a la presencia parcial del otro, podemos adelantar sus encuentros. Aproximadamente después de dos meses de sutil entrenamiento olfativo, cuando las reacciones son positivas, ya podemos hacer que nuestras mascotas se encuentren en un lugar, pero eso se hace con mucho cuidado.
En una habitación amplia estaremos con nuestras dos mascotas sin obligarlas a estar juntas. Pregúntale a un amigo o familiar para mimar a tu gato, que debe estar al otro lado de la habitación bastante lejos del perro, que debe ir con una correa alrededor del cuello para no correr ni molestar al gato. Mientras tanto, puedes mimar a tu perro, tratando de evitar que ladre, ya que podría incomodar al gato. Si ambos continúan con un comportamiento favorable, debes premiarlos, pero en caso de que el comportamiento sea negativo, debes distraerlos y buscar calmarlos. También pueden intercambiar roles y puedes mimar a tu gato mientras tu amigo mima a tu perro.
No debes usar la agresión o regañarlos en este momento., porque podrían considerar la presencia del otro individuo como algo negativo. Queremos evitar que nuestras mascotas se relacionen con algo negativo, por eso, una vez que nuestros animales estén tranquilos y con un comportamiento neutro o positivo, los premiaremos. Esto lo haremos durante unas dos semanas, puede ser más si lo consideras necesario.
Consejos para tener perros y gatos en la misma casa
No te dejes llevar por el mito que dice que gatos y perros no pueden convivir o son enemigos naturales. Esta es una mentira promovida por los medios y generalmente por el cine con fines lucrativos. En la vida real, los animales domésticos como gatos y perros pueden convivir en perfecta armonía.
Incluso cuando hablamos de conejos y gatos, hurones, aquellos o incluso canarios, cuando enseñamos a nuestras mascotas a valorar y respetar a otros individuos, incluso sus instintos pueden ser controlados.
Toma todo el tiempo que necesites. Hacer que un gato y un perro (especialmente los ancianos) vivan juntos puede ser un poco difícil. Pero con tiempo, esfuerzo y dedicación podemos lograr que se respeten y convivan en armonía.
